MOSCÚ, RUSIA, 16 MARZO 2024 (Reuters).- Un ataque con misiles ucraniano mató a dos personas en el oeste de Rusia y otro ataque con drones incendió una refinería de petróleo el sábado, segundo día de unas elecciones que el presidente Vladimir Putin ha acusado a Kiev de intentar alterar.
La guerra de Ucrania ha ensombrecido la votación en las elecciones presidenciales de tres días, que seguramente le darán a Putin seis años más en el Kremlin.
En la región de Belgorod , donde los ataques transfronterizos desde Ucrania se han convertido en parte de la vida cotidiana, el gobernador informó de la muerte de un hombre y una mujer. Un vídeo obtenido por Reuters mostraba incendios en llamas y sirenas antiaéreas sonando en las calles vacías de la ciudad de Belgorod.
Dmitry Azarov, gobernador de la región de Samara, a 850 kilómetros (530 millas) al sureste de Moscú, dijo que la refinería de Syzran estaba en llamas pero que se había frustrado un ataque a una segunda refinería.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que había repelido los intentos de las fuerzas ucranianas de cruzar la frontera hacia la región de Belgorod. El gobernador Gladkov dijo que, dada “la situación actual”, las escuelas en gran parte de la región cerrarían el lunes y el martes, y los centros comerciales en la ciudad de Belgorod cerrarían el domingo y el lunes.
Ucrania ha llevado a cabo repetidos ataques esta semana en suelo ruso, particularmente contra refinerías de petróleo. Rusia organizó el viernes su ataque más mortífero en semanas cuando sus misiles alcanzaron una zona residencial en la ciudad portuaria ucraniana de Odesa , en el Mar Negro, matando al menos a 20 personas e hiriendo a más de 70.
El control de Putin en el poder no está amenazado. De 71 años y en el cargo de presidente o primer ministro desde el último día de 1999, domina el panorama político de Rusia y ninguno de los otros tres candidatos en las papeletas de votación presenta ningún desafío creíble.
Sus principales críticos están en prisión o han huido al extranjero, lo que llevó a la oposición a calificar la votación como una farsa. El político opositor más conocido de Rusia, Alexei Navalny , murió en una colonia penal del Ártico el mes pasado y sus partidarios han acusado a Putin de haberlo ordenado matar. El Kremlin lo negó y su certificado de defunción decía que murió por causas naturales.
ALTA PARTICIPACIÓN EN ALGUNAS REGIONES
El Kremlin espera una alta participación para demostrar que el país está unido detrás de Putin.
La participación general había superado el 40% en la tarde del segundo día. Algunas de las tasas más altas (cercanas al 70%) se registraron en la región de Belgorod, donde ocurrió el ataque con misiles, y en las regiones de Ucrania controladas por Rusia, donde Kiev dice que la votación es ilegal y nula.
El partido gobernante de Rusia, Rusia Unida, dijo el sábado que se enfrentaba a un ataque generalizado de denegación de servicio -una forma de ciberataque destinado a paralizar el tráfico web- y que había suspendido servicios no esenciales para repelerlo.
La agencia estatal de noticias RIA citó a un alto funcionario de telecomunicaciones diciendo que el nivel de ciberataques contra Rusia no tenía precedentes y culpando de ello a Ucrania y los países occidentales. Dijo que parte de la actividad había sido rastreada hasta direcciones IP en Europa occidental y América del Norte.
En la votación del viernes hubo un puñado de protestas, incluido el vertido de líquido teñido en las urnas y el lanzamiento de un cóctel Molotov en un colegio electoral en la ciudad natal de Putin, así como ataques cibernéticos reportados.
La jefa de la comisión electoral, Ella Pamfilova, dijo el viernes que las personas que intentaron perturbar la votación eran “basura” y podrían enfrentarse a hasta cinco años de prisión.