Kiev, Ucrania, 8 may. 2022 (Reuters).- Los combatientes ucranianos en la planta siderúrgica Azovstal sitiada en el puerto de Mariupol, en el sureste del país, que son el último bastión contra las fuerzas rusas en la ciudad, prometieron el domingo continuar con su posición mientras vivan.
“Seguiremos luchando mientras estemos vivos para repeler a los ocupantes rusos”, dijo el capitán Sviatoslav Palamar, comandante adjunto del Regimiento Azov de Ucrania, en una conferencia de prensa en línea.
“No tenemos mucho tiempo, estamos bajo un intenso bombardeo”, dijo, suplicando a la comunidad internacional que ayude a evacuar a los soldados heridos de la planta.
Illia Samoilenko, un combatiente del Regimiento Azov que también participó en la conferencia virtual, dijo que todavía tenían armas, municiones y agua, y que estaban preparados para luchar todo el tiempo que fuera necesario.
“Podemos morir en cualquier momento… Nuestro mensaje es que no desperdicien nuestros esfuerzos”, dijo Samoilenko, quien pidió al gobierno ucraniano que confíe más en continuar luchando contra las fuerzas rusas que en la esperanza de que Moscú pueda ser pacificado mediante negociaciones.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, dijo en un discurso nocturno el sábado que más de 300 civiles habían sido rescatados de la planta de Azovstal. Dijo que las autoridades ahora se enfocarán en evacuar a los heridos y a los médicos, y ayudar a los residentes en otras partes de Mariupol y los asentamientos circundantes a estar seguros.
Palamar dijo que no podía confirmar que todos los civiles hayan sido evacuados de la planta ya que los combatientes ucranianos no pueden revisar y despejar todas las áreas bombardeadas.