Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 1 de enero de 2025.- A pesar de que los argentinos mantienen una perspectiva optimista para el 2025, la despedida del año se vivió con menos sidra y champagne en las mesas, según informaron las principales bodegas del país.
El aumento en el costo de los espumantes llevó a muchos a brindar con el mismo vino que acompañó la cena, y se observó una disminución en el consumo de ciertos productos tradicionales, como el asado. Algunas bodegas reportaron caídas de más del 50% en sus ventas.
Armando Eugenio Farina, vicepresidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM), comentó que este año los consumidores han dejado de lado la copa de sidra o champagne durante el brindis. “Se brindó con lo que había en el vaso, ya sea agua, cola o Fernet”, afirmó Farina en una entrevista con TN. Curiosamente, las ventas de Fernet aumentaron durante estas fiestas, lo que podría indicar un cambio en las preferencias de consumo.
Sin embargo, las ventas no lograron recuperar lo perdido en los meses de agosto, septiembre, octubre y noviembre. Una situación similar se observó con el gin. “Notamos el impacto de la recesión en la segunda mitad del año pasado y en la primera mitad de este año, aunque con la llegada de los días más cálidos, las ventas se recuperaron notablemente, tanto en los canales mayoristas como en nuestro propio bar”, informó Destilería Moretti.
En este contexto, la mayoría de las bodegas cerró el 2024 con resultados negativos, aunque las expectativas para el 2025 son más alentadoras. Farina señaló que, si bien “las ventas habían mostrado un leve repunte mes a mes, en diciembre no se sintió el ambiente festivo hasta los últimos días. Algunas categorías, como espumantes, sidra y champagne, han sufrido caídas significativas”. De hecho, reveló que la sidra es una categoría que ha sido prácticamente destruida, con ventas desastrosas.
Las cenas familiares de las fiestas se asemejaron más a una comida cotidiana, con la venta de Mantecol como el único producto que ha mostrado un repunte, al igual que el Fernet. “Cuando la mesa estuvo bien surtida fue gracias a las cajas navideñas que recibieron en las empresas”, comentó.
En algunos supermercados, las ventas de espumantes y sidras cayeron más del 70%. Muchos consumidores optaron por marcas más económicas, ya que los productos más demandados rondan los $12,000, mientras que hay alternativas disponibles por $7,500. En el caso de las sidras, las ventas disminuyeron más del 30%. Según Bodegas Bianchi, este año el mercado de espumantes cayó un 18% en volumen.
Los consumidores están siendo más cautelosos con sus decisiones de compra, eligiendo otras categorías de bebidas, impulsados principalmente por promociones y ofertas atractivas. Algunas bodegas, como Chañarmuyo, reportaron una caída del 50% en las ventas de espumosos en comparación con 2023. Este segmento de espumantes es el que ha experimentado la mayor variación negativa este año. A pesar de un cierre de 2024 complicado para la mayoría de las bodegas, las expectativas para el 2025 son prometedoras.
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