El Congreso aprueba el presupuesto 2026, el primero de Milei

Buenos Aires, 27 de diciembre de 2025.- Tras 11 horas de tratamiento, el Senado convirtió en ley el viernes el primer presupuesto de ajuste bajo la presidencia de Javier Milei, cerrando así el período de sesiones extraordinarias. La votación, con 45 votos a favor y 25 en contra, mostró una división interna en el peronismo, que, por primera vez, se mostró fracturado.

La sesión comenzó pasadas las 12:15 h con la jura de Enzo Fullone, quien asumió formalmente su banca como senador. Luego de las cuestiones de privilegio planteadas por algunos senadores, se dio comienzo a las 13.30 h con el tratamiento del Presupuesto 2026, el cual prevé gastos totales por $148 billones, un superávit primario del 1,2% del PBI, una inflación anual proyectada del 10,1%, un tipo de cambio estimado en $1.423 para diciembre de 2026 y un crecimiento del Producto Bruto Interno del 5%.

Tres senadores peronistas, Guillermo Andrada (Catamarca), Sandra Mendoza (Tucumán) y Carolina Moisés (Jujuy), se alinearon con el gobierno, mientras que el resto de la bancada se opuso firmemente al proyecto.

Ajuste y resistencia: un presupuesto polémico

A pesar de los intentos de la oposición por frenar los artículos más controvertidos, el oficialismo logró que se mantuvieran los artículos 12 y 30 del capítulo 2, que establecen ajustes significativos en sectores clave como la educación, la ciencia y la tecnología, y que también desfinancian el sistema de defensa nacional. Durante el debate, altos funcionarios del gobierno, como Diego Santilli, Martín Menem y Carlos Guberman, se mantuvieron atentos al desarrollo de la sesión desde el despacho de Patricia Bullrich. Desde allí, se coordinaron reuniones y llamadas estratégicas para asegurar la aprobación.

Un momento clave se produjo cuando el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, sumó a la senadora Edith Terenzi a favor del artículo más controvertido, mientras Santilli seguía realizando reuniones de última hora para garantizar los apoyos necesarios. La senadora Florencia López acusó al gobierno de “comprar votos” a través de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), señalando la distribución de fondos a las provincias como un intento de manipulación política.

Persistencia de la oposición

Tras la aprobación en general, la oposición continuó con la votación particular del artículo 30, pero el oficialismo logró rechazarla. La senadora peronista Anabel Fernández Sagasti denunció que el gobierno no quería someter a votación el presupuesto en detalle porque lo consideraba “una vergüenza nacional”. Además, cuestionó que el proyecto violaba el reglamento del Senado y criticó duramente el ajuste en el sector educativo. “El artículo 30 no tiene nada que ver con el déficit fiscal, es un ataque a la educación pública”, sostuvo Sagasti.

La senadora también expresó su rechazo al nombramiento de Gerardo Milman como director de Relaciones con las Provincias en el Senado, acusándolo de ser un “ñoqui de lujo”. Este nombramiento, realizado por Bartolomé Abdala durante la misma sesión, generó aún más críticas dentro de la oposición.

Presupuesto y proyecciones para 2026

Este presupuesto es el primero aprobado durante el mandato de Milei, quien asumió la presidencia a finales de 2023. Con 46 votos a favor, 25 en contra y una abstención, la Cámara aprobó un gasto total de 102.000 millones de dólares (equivalentes a 148.000 millones de pesos argentinos) y proyectó un crecimiento económico del 5% para 2026. Además, se prevé una inflación del 10,1% y un superávit primario del 1,2% del Producto Interno Bruto (PIB).

Es el primer presupuesto aprobado desde que Milei asumió el cargo, ya que durante sus primeros meses de gestión se prorrogó el presupuesto de 2023, sin alcanzar acuerdos legislativos, lo que afectó gravemente a varios sectores de la economía y exacerbó la inflación, que alcanzó casi el 300% en abril de 2024.

Recortes y aumentos: impacto social y económico

Según el informe de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), el presupuesto para 2026 refleja un aumento del 7% en términos reales respecto al de 2025, pero una caída del 24,6% en comparación con el presupuesto de 2023. A pesar de los aumentos en los sectores de salud, educación y seguridad social, los recortes de años anteriores siguen teniendo un impacto negativo en las finanzas públicas y en los sectores más vulnerables.

Un logro político para el Gobierno de Milei

Desde el oficialismo, se celebró la sanción del presupuesto como una victoria política clave. “Después de años de inestabilidad, conseguimos un presupuesto equilibrado, con déficit cero y ajustado a la realidad económica del país”, comentó un alto funcionario de la Casa Rosada.

La aprobación fue posible gracias al trabajo conjunto de la mesa política de La Libertad Avanza, liderada por Patricia Bullrich, quien debutó en el Senado con este importante triunfo legislativo. A pesar de algunas tensiones y desacuerdos, la estrategia del gobierno, encabezada por Milei, permitió superar los obstáculos y conseguir los apoyos necesarios.

La reforma laboral: el próximo gran desafío del Gobierno

Con la aprobación del presupuesto, el gobierno de Milei apunta ahora a su próximo desafío: la reforma laboral. El proyecto, que será impulsado por los ministros Federico Sturzenegger (Desregulación y Transformación del Estado) y Luis Caputo (Economía), propone modificaciones sustanciales al sistema laboral y tributario de Argentina. Sin embargo, la iniciativa enfrenta una fuerte resistencia tanto de los sindicatos como de sectores de la oposición.

Perspectivas para 2026: estabilidad y reformas profundas

La sanción del presupuesto marca un paso clave para el gobierno de Milei, quien continúa consolidando su poder legislativo tras una sólida victoria electoral en octubre. En su equipo, destacan figuras como Patricia Bullrich y Martín Menem, quienes desempeñaron roles cruciales en la Cámara de Diputados y el Senado para garantizar la aprobación del presupuesto. La coordinación con los gobernadores, especialmente a través de Diego Santilli, será fundamental para avanzar con las reformas estructurales y afrontar los desafíos económicos que se presenten en los próximos años.