
Buenos Aires, 26 de noviembre de 2025.- El Gobierno logró refinanciar casi la totalidad de los vencimientos por 14,6 billones de pesos que enfrentaba esta semana, un desafío relevante para el programa financiero. Con apenas 4,4 billones disponibles en las cuentas del Tesoro en el Banco Central, el rollover se convirtió en una señal clave para los mercados. La Secretaría de Finanzas informó que se adjudicaron 13,99 billones sobre ofertas por 14,68 billones, lo que implica una renovación del 96,48 por ciento.
Mientras avanzaba la licitación, el Banco Central aplicó una serie de cambios en la política de encajes para liberar liquidez y sostener la demanda por instrumentos del Tesoro. Max Capital destacó que el organismo redujo en 3,5 puntos porcentuales el efectivo mínimo para cuentas a la vista, cauciones y money market, lo que flexibiliza el sistema. También aumentó en 3,5 puntos la porción de encajes para depósitos a plazo que puede integrarse con títulos públicos.
Para los analistas, esta combinación apunta a sostener el mercado de deuda en pesos sin relajar en exceso la política monetaria. La reducción del encaje mínimo diario, que bajó del 95 al 75 por ciento, otorga más margen operativo a los bancos. Además, se prorrogó hasta marzo la mayor integración con bonos públicos autorizada en agosto, lo que refuerza la demanda de papeles del Tesoro.
Según Max Capital, parte de los vencimientos correspondía a bonos emitidos para que los bancos integraran encajes, por lo que la flexibilización anunciada por el Banco Central busca garantizar una renovación ordenada. El ajuste implica una caída de 1.900 millones en reservas de efectivo, compensada por una demanda potencial de unos 2.100 millones en títulos públicos. El objetivo, señalan, es equilibrar la liquidez: liberar recursos sin crear tensiones cambiarias ni presionar sobre los pesos disponibles.
Tras las elecciones de medio término, la Secretaría de Finanzas se vio obligada a buscar un refinanciamiento cercano al 70% para evitar tensiones de liquidez en un contexto de bajas tasas de interés, según adelantó Infobae. Lucio Garay Méndez, economista de EcoGo, señaló que “el resultado es acorde con lo esperado. Sin pesos en los depósitos, no podía haber un rollover muy por debajo del 100% y la estacionalidad en la demanda de pesos sesgaba la licitación. Por ambas razones tiene sentido un refinanciamiento cercano al 100%, como ocurrió en esta ocasión”.
La liberación de casi 0,7 billones de pesos al mercado no se espera que modifique significativamente las tasas actuales, que rondan el 20% TNA. Garay Méndez destacó que el foco ahora estará en la evolución de la curva de pesos, aunque un movimiento significativo dependerá de tres meses consecutivos de desaceleración en la inflación.
El analista financiero Christian Buteler coincidió en que la licitación fue positiva considerando los recursos limitados del Tesoro en el Banco Central. Según explicó, las tasas dejaron de bajar, pero se mantuvieron en niveles razonables. “En líneas generales ha sido una buena licitación, porque lograron estirar vencimientos, evitando acumular obligaciones fuertes, algo positivo tras el periodo electoral”, agregó.
Tras los comicios, el equipo económico busca dejar atrás el “apretón monetario” que evitó que los pesos se volcaran al dólar y prioriza estimular el crédito para reactivar la economía. Los primeros datos muestran señales alentadoras: el Indec informó que la actividad económica en septiembre creció 5% interanual y 0,5% intermensual, impulsada por Intermediación financiera (39,7% anual) e Impuestos netos de subsidios (10,5%).
En paralelo, el Banco Central redujo la tasa que paga a los bancos por retirar dinero de circulación del 22% al 20% anual y flexibilizó los encajes bancarios, liberando más pesos en el sistema. El objetivo es fomentar el crédito a empresas y familias y sostener la reactivación tras el apretón monetario previo a las elecciones.
Con Infobae/Ámbito/Iprofesional
