
Buenos Aires, 5 de agosto de 2025.- El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Martín Rappallini, manifestó en una entrevista con la señal Infobae en Vivo su preocupación ante la caída sostenida del empleo industrial y la desaceleración de la actividad. En una reciente reunión, las autoridades remarcaron la urgencia de implementar líneas de crédito que permitan sostener tanto la producción como el nivel de empleo, especialmente en un contexto de presión sobre los costos.
Si bien destacaron como positivos la desaceleración inflacionaria y el equilibrio fiscal alcanzado, insistieron en que es fundamental considerar las distintas realidades sectoriales que atraviesan las empresas. La entidad subrayó además la necesidad de estabilizar las tasas de interés en niveles compatibles con la capacidad financiera de las firmas, en particular de las pequeñas y medianas industrias (PyMIs), que enfrentan mayores dificultades para acceder a financiamiento.
Según datos del Centro de Estudios UIA (CEU), en el último trimestre la industria perdió un promedio de 1.500 puestos de trabajo mensuales. Desde agosto de 2023, la pérdida acumulada asciende a 37.000 empleos. La recuperación iniciada el año pasado muestra signos de estancamiento en los últimos cinco meses.
Durante el encuentro, se destacó también el esfuerzo del sector industrial en el marco del proceso inflacionario. Mientras que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumuló un 150% desde diciembre de 2023, el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) manufacturero avanzó solo un 86%. Esto indica que la industria ha resignado márgenes para contener aumentos.
Bajó el dólar
En el plano cambiario, el dólar oficial cerró en el Banco Nación a $1350, valor que actualmente funciona como referencia para el resto de las entidades bancarias.
En otras entidades bancarias, los valores de cierre fueron los siguientes: Galicia, $1345; Santander, $1360; Piano, $1360; ICBC, $1377; Supervielle, $1362; Macro, $1357; Provincia, $1365; Columbia, $1365; BBVA, $1360; Ciudad, $1365; y Patagonia, $1375.
El aumento reciente del dólar responde a una combinación de factores. Según el operador cambiario Gustavo Quintana, influyeron tanto el cierre de posiciones de fin de mes como una menor oferta de divisas, derivada del fin de la estacionalidad en el sector agroexportador. Esta presión adicional impulsó la demanda de cobertura y generó correcciones alcistas.
Pablo Lazzati, CEO de Insider Finance, atribuye el alza a la liberación de pesos tras el vencimiento de una Lecap corta y la falta de renovación en una reciente licitación del Tesoro. Parte de esos fondos se dirigieron al mercado cambiario, ejerciendo presión sobre la cotización.
En tanto, Segundo Derdoy, analista de Inviu, señala que el incremento en el tipo de cambio se vincula al desanclaje de expectativas generado por la eliminación de las Letras de Financiamiento (Lefi). Esta dinámica podría reducir la prima por riesgo de depreciación incorporada en las tasas en pesos y facilitar un ajuste hacia menores rendimientos.
Derdoy considera alentador el comportamiento conjunto de la tasa fija en pesos y la cotización del dólar, lo que sugiere un proceso de ajuste sin pérdida de credibilidad. A su juicio, el mercado se encamina hacia niveles de tasas más bajos, en línea con lo observado en la última licitación.
Respecto a la evolución futura, Derdoy estima que el dólar se encuentra cerca de su techo dentro de la banda de flotación. Por tanto, la presión debería ceder y podría incluso anticiparse una baja en la demanda, ante la posibilidad de intervención del Banco Central.
Lazzati, por su parte, cree que el comportamiento del dólar dependerá del impacto de la próxima liquidación de deuda local. Anticipa un rango de cotización entre $1.250 y $1.325 en las semanas siguientes.
Gustavo Ber coincide en que la divisa podría estabilizarse, descartando un avance hasta el límite superior de la banda cambiaria. Sostiene que el mercado tenderá a autorregularse y que el dólar podría moverse entre $1.300 y $1.350 en el corto plazo.
Desde Buenbit, informaron que la volatilidad en la cotización impulsó un aumento en la actividad cambiaria de sus usuarios. La plataforma prevé que este escenario de inestabilidad persista, sobre todo a medida que se aproximan las elecciones de medio término.
Quintana advierte que podría observarse cierta calma tras el cierre de posiciones de fin de mes y con ingresos adicionales desde el sector agroexportador. No obstante, recuerda que agosto marca el inicio del período preelectoral, un contexto que históricamente incentiva la dolarización en la economía argentina.
Con Infobae/El Economista/Iprofesional