
Buenos Aires, 3 de agosto de 2025 (Mi Periódico).- El receso invernal concluyó en Mar del Plata con una ocupación hotelera por debajo de lo esperado y una marcada retracción en el consumo. Aunque las cifras oficiales del municipio indicaron un leve incremento en el número de visitantes respecto al año anterior, la percepción entre comerciantes y operadores turísticos fue distinta. Coincidieron en que hubo menos turistas, menor demanda de alojamientos y un consumo visiblemente reducido, de acuerdo con un informe publicado por el diario La Capital.
Desde el inicio del receso, los datos fueron desalentadores. La ocupación hotelera alcanzó apenas el 30 %, al menos 15 puntos por debajo del mismo período en 2024. Ese arranque débil marcó la tendencia del resto de las vacaciones. El segundo fin de semana mostró una leve mejora: la ocupación promedio subió al 55 %, aunque con notorias diferencias entre establecimientos. Algunos hoteles llegaron al 80 %, mientras otros no recibieron ningún huésped, según informó la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica.
Durante el tercer fin de semana, la actividad volvió a caer. La ocupación promedio descendió nuevamente al 35 %, con una baja aún más pronunciada en el segmento extrahotelero. La impresión generalizada fue que la cantidad de visitantes estuvo por debajo de las expectativas y, sobre todo, que quienes viajaron limitaron significativamente sus gastos.
Un operador hotelero señaló un “importante ajuste” en el consumo, visible en salidas recreativas, comidas y compras. “En este contexto, la gente cuida mucho cada peso que gasta”, remarcó.
El clima tampoco ayudó. Lluvias el viernes, cielo nublado el sábado y chaparrones pronosticados para el domingo disuadieron a muchos turistas. Representantes del sector coincidieron en que las condiciones meteorológicas influyeron negativamente en la decisión de viajar a la costa.
Desde el Colegio de Martilleros y Corredores Públicos, la vicepresidenta Verónica Berasueta hizo un balance sobrio: “Terminamos con una ocupación cercana al 30 %, en línea con lo que habíamos proyectado por las reservas. Se notó más movimiento los fines de semana. Aunque el año pasado fue del 50 %, para la situación económica actual fueron vacaciones tranquilas”, evaluó.
A pesar de la caída en los alquileres temporarios, Berasueta señaló que el mercado inmobiliario sigue activo, especialmente en ventas. “Muchos vienen durante los fines de semana largos a ver propiedades. Tal vez no cierran la operación en el momento, pero luego sí se concretan”, explicó.
Por otro lado, el Ente Municipal de Turismo y Cultura (Emturyc) presentó cifras que contrastan con las evaluaciones privadas. Según los datos oficiales, entre el 21 y el 27 de julio arribaron a Mar del Plata 157.127 turistas, un 0,3 % más que en la misma semana de 2024. En total, entre el 18 y el 27 de julio llegaron 225.143 visitantes, lo que representa un incremento del 2,1 % respecto al año pasado.
Estas cifras contrastan con el panorama descrito por empresarios hoteleros, gastronómicos y comerciantes, que hablan de una fuerte caída de la actividad. Vale recordar que en 2023 Mar del Plata recibió unos 350.000 turistas durante las vacaciones de invierno, un 6 % menos que en 2022, cuando la cifra superó los 375.000. En ambos casos, los operadores señalaron ocupaciones superiores al 60 %, tanto en hoteles como en alojamientos extrahoteleros.
El clima adverso volvió a jugar en contra durante este último fin de semana. La alerta amarilla por tormentas y las precipitaciones intensas del viernes disuadieron a muchas familias de viajar o extendieron menos su estadía. Como resultado, se incrementó la afluencia a espacios cerrados: cines, centros comerciales, locales gastronómicos, teatros y salas de juegos electrónicos.
Uno de los puntos más concurridos fue el Paseo Aldrey, donde las salas de cine trabajaron casi al límite de su capacidad con propuestas familiares como Superman, Jurassic World, Pitufos y la producción nacional El novio de mamá. El patio de comidas también tuvo una alta rotación, gracias a su variada oferta.
El flojo movimiento turístico fue parcialmente compensado por la participación local. Muchas familias marplatenses aprovecharon el receso escolar para asistir a diversas actividades recreativas. El ciclo “A desaburrir el invierno”, en el Teatro Auditorium, cerró con más de 30.000 espectadores y funciones agotadas en varias jornadas. Este año se destacó por la participación de artistas locales, acceso gratuito y una programación diversa y lúdica. “Estamos plenos, satisfechos, felices. Hubo más espectáculos marplatenses y un público mayoritariamente local”, destacó Vito Amalfitano, director del complejo.
Situaciones similares se repitieron en el Museo MAR y en otros escenarios municipales, que también registraron gran concurrencia a lo largo de las vacaciones.
Aunque el público local brindó cierto dinamismo, no alcanzó para revertir la caída en el flujo turístico. Como cierre del receso, estaba prevista la segunda edición del “Cafest”, un evento que combina café de especialidad con música electrónica. Sin embargo, debido al mal tiempo, el festival fue reprogramado para el domingo 10 de agosto en Villa Victoria y Villa Mitre. La entrada será libre y gratuita, y participarán 38 emprendimientos con degustaciones, propuestas gastronómicas y DJs en vivo.
Este lunes se reanudan las clases en las escuelas de la provincia de Buenos Aires. En el sector turístico, las miradas ahora se concentran en el próximo fin de semana largo, que irá del viernes 15, declarado no laborable con fines turísticos, al domingo 17 de agosto, fecha en que se conmemora el Paso a la Inmortalidad del General José de San Martín.