
Nueva Delhi, 23 de julio de 2025 (EFE).- Las lluvias torrenciales del monzón, que desde finales de junio ya han causado 234 muertos en Pakistán, continuarán al menos hasta este viernes, según la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres de este país asiático.
Las autoridades paquistaníes han emitido este miércoles un nuevo aviso advirtiendo de posibles inundaciones, deslizamientos de tierra e inundaciones repentinas de lagos glaciares en el norte de Pakistán, la zona más afectada por las lluvias.
Casi medio millar de personas rescatadas
El martes 13, personas murieron a causa de las tormentas eléctricas e inundaciones repentinas en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, según el canal paquistaní Geo TV.
Además, las autoridades informaron del rescate de las 250 personas que permanecían atrapadas en una carretera en la cordillera del Karakórum, uno de los puntos más turísticos de Pakistán.
Los responsables han recomendado a los turistas evitar las zonas montañosas del país ante el riesgo de derrumbes.
Hasta ahora, la mayoría de las víctimas de las lluvias han perdido la vida al desplomarse sus viviendas, en muchos casos, infraestructuras deficientes.
No obstante, los equipos de emergencia han rescatado a casi medio millar de personas en distintas regiones.
Las intensas lluvias han afectado también a terrenos agrícolas e instalaciones eléctricas.
Pakistán, uno de los países que más acusa el cambio climático
El monzón afecta al sur de Asia cada año entre los meses de junio y septiembre y constituye el principal aporte de precipitaciones de Pakistán, que recibe entre el 70 y el 80 % de sus lluvias anuales.
Pakistán es uno de los países más vulnerables a los efectos del cambio climático y sufre con frecuencia fenómenos extremos.
En 2022, lluvias monzónicas sin precedentes y el deshielo de glaciares sumergieron un tercio del país, provocando más de 1.700 muertes.
El monzón se estableció el pasado 26 de junio en Pakistán, después de un inicio temprano en el mar Arábigo, frente a la costa meridional india.