
Viena, Austria, 13 de junio de 2025.- El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha declarado que el reciente ataque de Israel contra Irán, ocurrido el pasado viernes, representa una grave amenaza para la seguridad nuclear global y vulnera las normativas de Naciones Unidas sobre el uso de la fuerza contra instalaciones atómicas.
Rafael Grossi, director general del OIEA, calificó el incidente como “extremadamente preocupante” y reiteró su postura: “Las instalaciones nucleares nunca deben ser objetivo de ataques, sin importar el contexto, debido al riesgo potencial para la población y el medio ambiente”. El organismo advirtió que este tipo de acciones podría desencadenar fugas radiactivas con consecuencias transfronterizas.
Durante su comparecencia ante la Junta de Gobernadores del OIEA, Grossi recordó que múltiples resoluciones de la ONU establecen que cualquier ataque contra instalaciones nucleares pacíficas “viola la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y los estatutos del propio organismo”.
El OIEA verificó que los niveles de radiación se mantuvieron estables en la planta de enriquecimiento de uranio de Natanz tras los bombardeos israelíes. Inspectores internacionales, presentes en Irán desde hace diez años, realizaron las evaluaciones correspondientes.
La agencia nuclear también confirmó, basándose en informaciones del gobierno iraní, que otras instalaciones estratégicas permanecieron intactas: la central nuclear de Bushehr (operativa desde 2011), la planta subterránea de Fordow (dedicada al enriquecimiento de uranio) y el complejo de Isfahan (donde se procesa uranio en gas para su posterior tratamiento en Natanz, el principal centro afectado por el ataque).
Ataque preventivo
Los dirigentes israelíes calificaron el “ataque preventivo” de lucha por la supervivencia de la nación, añadiendo que era necesario para atajar lo que calificaron de amenaza inminente que supondría el desarrollo de armas nucleares por parte de Irán.
Aún no está claro lo cerca que está el país de conseguirlo o si realmente había estado planeando un ataque. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que Israel tenía como objetivo tanto instalaciones nucleares como militares.
“Podría ser dentro de un año. Podría ser dentro de unos meses”, dijo el primer ministro Benjamin Netanyahu al prometer proseguir el ataque durante el tiempo que sea necesario para “eliminar esta amenaza.” “Se trata de un peligro claro y presente para la propia supervivencia de Israel”, afirmó.
Israel ha decidido cerrar las escuelas el viernes como medida de protección, ya que se espera una campaña de represalias iraníes. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, confirma que Washington no participó en los ataques.
Los medios estatales iraníes confirmaron la muerte del general Hossein Salami, jefe del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán. También han muerto otro alto cargo del IRGC, Bagueri, y dos científicos nucleares. Teherán ha prometido responder con firmeza a lo que considera una grave escalada.
El ataque contra Irán puso al ejército israelí al límite de sus fuerzas
El ataque contra Irán puso al ejército israelí al límite de sus fuerzas, y requirió el uso de anticuados aviones de reabastecimiento en vuelo para que sus cazas pudieran acercarse lo suficiente para atacar. No quedó claro de inmediato si los aviones israelíes entraron en el espacio aéreo iraní o simplemente dispararon los llamados “misiles standoff” sobre otro país. Al parecer, en el momento del ataque se oyeron aviones de combate sobrevolando Irak.
Con Euronews, EFE y AP