Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 1 de enero 2025.- El compositor y músico argentino Leopoldo Dante Tévez, conocido como Leo Dan, murió este miércoles. Así lo confirmaron en sus cuentas oficiales, aunque no dieron a conocer la causa de su fallecimiento.
En el comunicado oficial su familia destacó que Leo Dan “partió en paz y acompañado del amor de sus seres queridos”, describiéndolo como un guía espiritual que seguirá iluminando a todos aquellos tocados por su arte. Asimismo, invitaron a sus seguidores a celebrar su vida y su música eterna.
“Esta mañana nuestro amado Leo Dan dejó su cuerpo en paz y junto al amor de su familia. Así, volvió a la luz pura de su Padre Celestial, para guiarnos y cuidarnos desde el infinito. El día de hoy, 1.º de enero del 2025, invitamos a todos los que formaron parte de su historia y que fueron tocados por su legado, a celebrar su amor, su música y su vida. Con mucha paz en el corazón, recordamos y sentimos su profundo amor… por siempre.”
“Entonces Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque muera, vivirá.” – Juan 11:25
Nacido el 22 de marzo de 1942 en Estación Atamisqui, en la provincia de Santiago del Estero, Leo Dan se convirtió en uno de los mayores exponentes de la música romántica en América Latina. Éxitos como “Cómo te extraño mi amor” y “Esa pared” quedaron grabados en el corazón de millones de personas, consolidándolo como un símbolo de la música popular.
A sus siete años, la familia se fue de aquel paraje y recaló en un rincón conocido como Puerta de los Cerros. Allí sembraban zapallos y criaban chanchos y cabras. Leopoldo se apartaba del arduo trabajo para hacer música. A los 16 formó Los Troveros, su primera agrupación. Después, ya imbuido por la modernidad, llegaron Los demonios del ritmo. Y llegó el momento de soltarle la rienda a su vocación de cantante. Olvidó el sueño de ser veterinario y se marchó del pueblo.
En 1966 llegó el amor. Fue en la costa atlántica cuando conoció a Mariette Papolczy, coronada como Miss Mar del Plata. Era una chica de origen húngaro, nacida en Budapest, y le llevó unas flores al cantante. “Fue amor fulminante”, recordó alguna vez Leo Dan.
La boda, celebrada en “La Feliz” a los pocos días de comenzar el noviazgo, quedó en la memoria colectiva no solo por su fastuosidad, sino por el caos que desató. La capilla fue escenario de avalanchas, fracturas de piernas y gritos desgarradores de las fans que se negaban a aceptar la unión. Era como si el amor de la pareja fuera una traición a la devoción de miles.
Con el tiempo, el vínculo con Mariette se convirtió en un pilar inquebrantable de su vida. Tuvieron cuatro hijos. En la década del 70, en la televisión mexicana, Leo Dan se prestó a un concurso llamado “el besómetro”, donde sus fanáticas lograban concretar parte de sus deseos y les medían la presión arterial y el ritmo de sus latidos. Ni eso los separó.