La Argentina paralizada por falta de combustible. Se reportan surtidos cerrados

Surtidores de naftas cerrados por falta de combustible se veían esta mañana en la estación de servicio Shell del cruce de las calle Gabino Ezeiza y la av. Bernabé Márquez, en la localidad de Loma Hermosa, en el municipio de Tres de Febrero (29 octubre 10:17). Foto: Edgardo Onischuk para miperiodico

BUENOS AIRES, 29 OCTUBRE 2023.- El país se ha quedado sin combustible. Si bien es cierto que el problema no es reciente, hemos visto en las últimas horas el mejor resumen de un país inmerso en el desorden económico y el desconcierto social.

Las causas son varias: el atraso cambiario, la falta de dólares, los problemas en las importaciones y por sobre todo la incertidumbre. A pesar de que las causas resultan algo más que evidente, el Gobierno atribuyó los problemas en el abastecimiento al aumento en la demanda de las naftas: increíblemente se responsabiliza a la gente de haber generado la escasez.

A través de un comunicado difundido este sábado, el sector petrolero se refirió a la falta de nafta y gasoil en estaciones de servicio, registrada entre el viernes y el sábado tanto en el interior del país como en la Ciudad de Buenos Aires, y aseguró que la situación actual de abastecimiento “se irá normalizando en los próximos días”. Sin embargo, las largas filas y el malestar de la gente persiste.

El faltante no es propio del rubro de los combustibles sino que el mismo se extiende a prácticamente todos los rincones del comercio argentino. Simplemente con ver las góndolas en los supermercados, buscar un repuesto para un automóvil o intentar adquirir algún bien del ámbito tecnológico uno se topara con una realidad insoslayable.

Las petroleras aseguraron, una vez más, que la situación se regularizará en los próximos de los días. “El crudo va a seguir fluyendo, las refinerías procesando, las importaciones entrando al país y la estructura logística se irá normalizando para el abastecimiento, considerando la gran dispersión geográfica del país”.

La secretaria de Energía, Flavia Royon, se reunió este viernes con las cuatro empresas refinadoras que firmaron el comunicado, tras el faltante de nafta y gasoil registrado en varios puntos del país.

Según publicó el diario La Nación en la reunión entre la secretaria de Energía y los representantes del sector no hubo definición sobre el tema, pese a que los valores en surtidor tienen un atraso de más del 25% y a que faltan solo cuatro días para que finalice el congelamiento. Tan solo se acordó la importación de 10 barcos de combustible para abastecer a las estaciones de servicio.

El desabastecimiento amplificado en los últimos días choca con un deseo del candidato y ministro de Economía, Sergio Massa: que hasta el balotaje no haya aumentos de precios.

El deterioro económico que se viene gestando durante las últimas décadas está terminando como lo indica el sentido común.

Desde el congelamiento de precios de combustibles a fines de agosto, solo YPF logró mantener prácticamente sin cambios sus valores en surtidor, a excepción del incremento de 3% del lunes último. El resto de las refinadoras aplicó al menos tres aumentos de 2,5%, lo que hizo crecer aún más la brecha de precios entre YPF y su competencia. Solo en la Ciudad de Buenos Aires (CABA), en algunas estaciones hay más de $30 de diferencia por litro de nafta, mientras que en el interior, la brecha es mayor.

YPF tiene una participación de mercado de 55% en el despacho de combustibles, con una demanda que crece aun más a medida que aumenta la brecha de precios.

Esta semana, además, se sucedieron otros problemas para la compañía que está controlada en un 51% por el Estado, luego de que la Secretaría de Comercio le restringiera también el acceso a dólares a empresas controladas por el Estado, debido a la escasez de reservas. Al menos tres buques cisterna tuvieron que hacer tiempo en la costa hasta que YPF le girara los dólares de pagos, como reveló el jueves Bloomberg.

Desde este viernes se reportaron extensas filas de automóviles para cargar combustible en numerosas estaciones de servicio en la zona del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y en diversas ciudades del país a causa del faltante de suministro de combustible, que se fue intensificando a lo largo de la semana.

A última hora de la jornada, podían verse muchas estaciones de servicio con largas filas de autos, como en el caso del ACA de Palermo. Situación similar se observaba en estaciones de las principales avenidas porteñas y del conurbano bonaerense. Este sábado los problemas continuaban, en tanto en algunas estaciones de la Ciudad se reportaban surtidores cerrados.

Surtidores de naftas cerrados se reportaron la mañana del domingo 29 de cotubre en la estacion de servicio Shell, ubicada en el cruce de las calle Gabino Ezieza y la av. Bernabé Márquez, en la localidad de Loma Hermosa, en el municipio de Tres de Febrero, Buenos Aires. Foto: Edgardo Onischuk para miperiodico

Inflación descontrolada en Argentina

La inflación que cercena los bolsillos de los argentinos, los niveles de ingreso que nos posiciona en un espectro amplio de pobrismo absoluto, la falta de productos, un nivel educativo diezmado por la insensatez de la política y de un sindicalismo rancio son parte de un combo que ha empobrecido sin pausa a la Argentina.

El “Estado presente” pregonado por el kirchnerismo lo ha destruido absolutamente todo. El esquema asistencial también fue el gran verdugo de lo que alguna vez fuimos. Los jubilados reciben a valores actuales un tercio del haber jubilatorio que recibían hace un cuarto de siglo. El descontrol en planes sociales sepultó la cultura del trabajo e hizo ricos a decenas de punteros políticos que encontraron en el necesitado una fuente de riqueza personal interminable.

Argentina supo ser una potencia económica mundial. La riqueza de un argentino llegó a ser similar a la de un norteamericano. También supo no tener inflación y ser una máquina de sacar gente de la pobreza. La política ha destruido la grandeza de estas tierras.

Cuando el país entienda que la educación, la inversión, el ahorro y el trabajo acompañados por instituciones sanas y el respeto por las leyes será allí el nuevo comienzo hacia un futuro que se encuentre muy lejos de la decadencia actual.

Con NA y La Nación