Allanan el hotel de Canning donde están alojados los cinco iraníes que viajaban en el avión varado en Ezeiza

El operativo fue ordenado por el juez Federico Villena. La Policía llegó anoche al Hotel Plaza Canning y revisó los dormitorios y las pertenencias de los tripulantes del vuelo sospechoso y de otros turistas que se alojan en el lugar.

Ezeiza, Buenos Aires, Argentina, 14 jun. 2022.- El Hotel Plaza Central de Canning, en el que están alojados los cinco iraníes que viajaban en un avión venezolano ahora varado en Ezeiza y eje de una investigación judicial, es allanado desde esta madrugada.

Allí se habrían secuestrado 18 celulares, siete notebooks, 5 iPad, 15 pasaportes y otra documentación. Formó parte de esta instancia, también, una traductora para permitir una mejor comunicación con estos hombres.

En un movimiento inusual para el hotel, que está colmado en su exterior por autos que trasladaron a quienes desarrollan el operativo, el dueño del establecimiento dijo no tener mayor detalle sobre lo que ocurre puertas adentro, mientras continúa el trabajo de requisa e identificación.

Ayer, Villena tomó la decisión de que se les retengan los pasaportes a estas cinco personas por un lapso de 72 horas en las que no podrán dejar el país y, también, pidió que la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) le informe cualquier movimiento que se produzca sobre el ­Boeing 747.

La Policía Federal no sólo revisó los dormitorios de la comitiva del viaje de la sospecha: también ingresó a las habitaciones de todas las personas que pasaron la noche en ese hotel. “El hotel tiene tres pisos y se revisó todo”, informaron fuentes consultadas por este medio.

Tanto los iraníes como los venezolanos se mostraron tranquilos durante todo el operativo y no mostraron resistencia. Se quedaron callados, casi sin hacer comentarios, agregaron las fuentes.

Los pasaportes incautados corresponden a los tripulantes venezolanos. En tanto, el procedimiento está a cargo del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista.

En tanto, la aeronave de carga se encuentra en el aeropuerto internacional desde el lunes pasado, cuando los iraníes aterrizaron junto a 14 venezolanos provenientes de Córdoba, adonde habían descendido antes por las malas condiciones climáticas marcadas por la neblina. En su interior, el avión llevaba autopartes y su tripulación fue abordada por las autoridades, en principio, por un problema en el manifiesto de vuelo: había siete nombres correspondientes a ciudadanos iraníes, cuando en realidad eran solo cinco a bordo.

Pero todo tomó otro tinte cuando se supo que podría haber una vinculación entre estas cinco personas y la fuerza Quds, que es un grupo calificado como terrorista por los Estados Unidos. Mientras que las autoridades nacionales aseguraron que ninguno de los tripulantes tenía alerta roja, ni prohibición para ingresar al país, los diputados opositores Gerardo Milman y Ricardo López Murphy presentaron una denuncia para que se investigue a los viajeros.

Ayer, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, contó que uno de los nombres de los tripulantes coincide con un miembro de la Guardia Revolucionaria de Irán. ”Si usted me pregunta a mí si es él, no lo sé. Coincide el nombre. Es lo que tenemos nosotros como dato concreto”, sostuvo el funcionario nacional, que agregó: “Hasta este momento es un nombre que es un homónimo, por homónimo usted no puede frenar un vuelo forzosamente”.

Por su parte, el titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Agustín Rossi, aseveró que los iraníes eran “instructores” que estaban capacitando a la tripulación para volar ese avión de Emtrasur Cargo, la división de carga de la firma de bandera venezolana Conviasa, que fue usado durante los últimos 15 años por la compañía iraní Mahan Air, sancionada por Estados Unidos.