Buenos Aires, 29 de noviembre de 2025.- A partir del lunes 2 de diciembre, el transporte público tendrá un aumento del 4,3% en la Ciudad de Buenos Aires. Este ajuste reemplaza el esquema previo, que combinaba un 2% mensual más la inflación. En la provincia de Buenos Aires se sumará además un incremento adicional del 10% previsto para el cierre del año.
Las autoridades porteñas señalan que la actualización busca recomponer el atraso tarifario. En el caso de los colectivos, explican que la tarifa cubre el 70% de los subsidios. Para el subte, el índice asciende al 76,3%, según cifras oficiales.
El nuevo cuadro tarifario establece que el boleto mínimo de colectivo en la Ciudad costará 593,52 pesos. En el Gran Buenos Aires será de 658 pesos. Dentro del AMBA convivirán tres valores distintos, ya que la jurisdicción nacional aplicó un aumento a mediados de noviembre, con un mínimo actual de 494,83 pesos.
El subte también subirá su tarifa: cada viaje costará 1.206 pesos. Además, desde diciembre al menos un molinete por estación acepta pagos con tarjetas de crédito y débito, además de SUBE, y avanza la incorporación del pago sin contacto. Según datos de Emova, estas modalidades ya representan el 30% de las transacciones.
Los peajes en las autopistas porteñas también tendrán incrementos en hora pico. Para autos, el valor será de 4.912,67 pesos en las autopistas Perito Moreno y 25 de Mayo, y de 2.042,38 pesos en la Illia. Por ley, el 10% de la recaudación financia la tarifa del subte, el 55% se destina a obras viales y el 5% a la ampliación de la red subterránea.
En las 30 líneas de colectivos gestionadas por el Gobierno porteño, el mínimo será de 593,52 pesos para trayectos de hasta 3 kilómetros. Entre 3 y 6 kilómetros, el pasaje costará 659,50 pesos. Los viajes de 6 a 12 kilómetros valdrán 710,31 pesos y los recorridos de entre 12 y 27 kilómetros llegarán a 761,15 pesos.
El Ejecutivo porteño sostiene que avanza un plan de modernización sobre más de 1.600 unidades, con incorporación de validadores multipaso, cámaras y mejoras en los recorridos. También impulsa la transición hacia energías limpias mediante incentivos para sumar colectivos eléctricos o a gas.
Una resolución publicada en el Boletín Oficial establece que desde enero de 2027 será obligatorio incorporar unidades de energías limpias cada vez que se retire de servicio un vehículo gasolero. Según proyecciones oficiales, en 2026 al menos el 15% de la flota será eléctrica o a gas, y en 2027 esa proporción llegará al 30%.