Haití: arrestan a uno de los supuestos autores intelectuales del asesinato de Moïse

Las autoridades de Haití identificaron a uno de los supuestos autores intelectuales del asesinato del presidente Jovenel Moïse. El sospechoso es Christian Emmanuel Sanon, un médico haitiano radicado en Florida, Estados Unidos, quien habría sido la primera persona con la que contactaron los miembros del comando que asesinó en su vivienda al mandatario.

HAITÍ, 12 JUL. 2021 — Las autoridades del país anunciaron el arresto de uno de los autores intelectuales del crimen: Christian Emmanuel Sanon, un médico de 63 años con residencia habitual en Florida desde hace más de dos décadas.

“Cuando se bloqueó el avance de los bandidos, la primera persona a la que llamaron fue Emmanuel Sanon”, señaló el director general de la Policía Nacional de Haití, Léon Charles, en una declaración ante la prensa, en la que consideró que el motivo del crimen es “político”.

El jefe de policía señaló que Sanon conspiraba para convertirse en el nuevo presidente de Haití, acusando a los políticos actuales de “corrupción” en repetidas ocasiones. Los asesinos lo habrían protegido como supuesto mandatario de la nación.

El contacto telefónico de miembros del comando es la principal prueba de su implicación en el asesinato, según las autoridades, pero no la única. Durante el registro de su casa, la Policía encontró una gorra de la DEA (Administración de Control de Drogas​), una caja de cartuchos, 20 cajas de balas, 24 blancos de tiro sin usar, cuatro matrículas de automóviles de la República Dominicana, dos coches y correspondencia con personas no identificadas.

Según fuentes oficiales, se está investigando el grado de implicación de los responsables de la seguridad del asesinado presidente. Al menos dos de los miembros del equipo de seguridad serán llamados a declarar.

La planificación del crimen

La puesta en marcha del asesinato habría comenzado en junio, mes en el que Sanon llegó a Haití en un avión privado con fines políticos. Pero fue durante ese viaje cuando se puso en contacto con una empresa de seguridad privada, CTU, de origen venezolano pero asentada en Estados Unidos, para contratar a los sicarios.

Una empresa que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo públicamente que pertenece a Antonio Intriago, venezolano vinculado con la oposición y, concretamente, con figuras como Juan Guaidó y Lepoldo López. 

Sanon voló a Haití acompañado de al menos seis de los sicarios que más tarde cometieron el crimen y que, en primer lugar, tenían una misión distinta: ocuparse de la seguridad del médico. Algo que más tarde se transformó en toda una trama de conspiración contra el presidente Moïse, a la que se sumarían 22 personas más.

En total, 26 colombianos, la mayoría de ellos exmilitares, son sospechosos del asesinato del presidente y 18 de ellos han sido detenidos, junto con tres estadounidenses de origen haitiano. Al menos cinco de los sospechosos siguen en libertad y tres han sido abatidos.

Debido a la alta participación de colombianos en el complot, Charles apuntó que estaba colaborando con altos funcionarios de ese país para esclarecer la información, como cuándo salieron de Colombia y quién pagó sus billetes.

Ahora, junto a los siete miembros del FBI enviados por Estados Unidos, la Policía haitiana intenta esclarecer quién financió la operación.

Por su parte, los dos estadounidenses de origen haitiano arrestados aseguraron durante un interrogatorio que no presenciaron el asesinato del presidente y que solo sirvieron de traductores. Además, aseguraron que el objetivo del operativo no era matar al presidente, sino secuestrarlo para forzar una transición política.

La reticencia de Estados Unidos a mandar tropas a Haití

La detención de Sanon se produce en un momento de inestabilidad política y de sensación de vacío de poder en Haití. Cada vez son más los políticos que no reconocen al actual presidente interino, Claude Joseph, como tal. Muchos se apoyan en que este estaba a punto de ser destituido de su cargo cuando se efectuó el asesinato e iba a ser sustituido por Ariel Henry. 

Pero, a pesar de las fuertes presiones de la oposición, Joseph sigue al mando del país con la ayuda de la Policía y del Ejército. Pero esta situación de crisis política ha hecho que el líder interino pida la ayuda e intervención de tropas militares estadounidenses en el país, algo que los expertos señalan como poco probable.

Según el periódico ‘The New York Times’, los altos funcionarios militares estadounidenses se muestran reacios a intervenir en Haití tras su reciente salida de Afganistán, ya que atentaría contra la estrategia de desescalada militar de la Administración de Joe Biden.

No obstante, el portavoz jefe del Pentágono, John Kirby, dijo el domingo a la cadena ‘Fox News’ que el Pentágono está analizando la solicitud del Gobierno interino haitiano y que todavía no se ha tomado ninguna decisión.

Por el momento, ya han enviado a agentes del FBI y del Departamento de Seguridad Nacional para ayudar con la investigación del asesinato y para esclarecer los hechos que llevaron al magnicidio.

“Creo que ahí es donde mejor se aplican nuestras energías en este momento, en ayudarles a investigar este incidente y averiguar quién es culpable, quién es responsable y cuál es la mejor manera de hacer que rindan cuentas en el futuro”, sostuvo Kirby durante su intervención en la televisión.

Claude Joseph también pidió ayuda a la OTAN. Naciones Unidas ha intervenido en Haití de forma intermitente desde 1990, pero las últimas fuerzas militares de paz de la ONU abandonaron el país en 2017. 

Con la sensación de inseguridad que ha generado entre los haitianos el asesinato del presidente, son muchos los líderes religiosos que pidieron a la población que controlara la ansiedad mientras la Policía esclarece los hechos. La débil estabilidad social pende de un hilo en el país más pobre de América.

“Todavía creemos que hay una gran posibilidad de que se produzca el caos”, señaló el ministro de Elecciones de Haití, Mathias Pierre, a la agencia AP.

Por lo que se sabe del principal sospechoso como autor intelectual del asesinato, Sanon se declaró en bancarrota en 2013 y lleva tiempo demostrando sus aspiraciones políticas. En 2011 -cuando Moïse no había hecho todavía su aparición en el mundo de la política- Sanon publicó un vídeo en el que denunciaba a los políticos de Haití como “corruptos” y aseguraba que no se preocupaban por sus ciudadanos.

En el vídeo, difundido en YouTube y titulado “Liderazgo para Haití”, el médico se postula como candidato a la Presidencia y asegura que Haití tiene uranio, petróleo y otros recursos de los que se han apropiado los funcionarios del Gobierno.

“Nueve millones de personas no pueden estar en la pobreza cuando tenemos tantos recursos en el país. Es imposible. (…) El mundo tiene que dejar de hacer lo que está haciendo ahora. No podemos soportarlo más. Necesitamos un nuevo liderazgo que cambie el modo de vida”, dice en sospechoso por el asesinato en el vídeo.

Junto a él, las autoridades también están investigando a dos presuntos autores intelectuales del asesinato con los que estuvo en contacto.

France24, con EFE, AP y medios locales