La muerte de un narcotraficante en un operativo policial desemboca en una oleada de ataques en la ciudad brasileña de Manaos

El gobernador del estado, Wilson Lima, pidió el envío de la Fuerza Nacional para reforzar la seguridad.

MANAOS, BRASIL, 7 JUN. 2021 — Manaos, capital del estado brasileño de Amazonas, sufre desde el domingo una ola de ataques lanzada por narcotraficantes en respuesta a la muerte de uno de sus miembros en una operación policial. 

La ciudad amaneció este lunes con las escuelas cerradas y el transporte público paralizado después de que varios autobuses fuesen incendiados. Los criminales también prendieron fuego a una unidad de salud, al edificio del sindicato de transportes y a varias sucursales bancarias. 

En un suceso que parecía sacado de una escena de película, y que recoge la prensa local, los narcotraficantes aprovecharon que el nivel del río Negro, el principal afluente del río Amazonas, estaba alto por las lluvias para llegar en barca hasta el centro de la ciudad y atacar una comisaría. Los agentes que estaban dentro del edificio contraatacaron y el episodio terminó sin heridos. 

‘Comando Vermelho’

Las autoridades sospechan que estos actos violentos han sido perpetrados por el ‘Comando Vermelho’, una de las mayores organizaciones de narcotraficantes del país, y que controla el narcotráfico y los presidios de Amazonas, puerta de entrada de cocaína del país.

La Secretaría de Seguridad Pública informó que los ataques se ordenaron desde dentro de una de las cárceles de la capital. El sábado, en el marco de una operación policial en el barrio Redenção, en la zona oeste de la ciudad, los agentes abatieron a Erick Batista Costa, conocido como ‘Dadinho’, miembro de la banda. 

A través de las redes sociales, el gobernador Wilson Lima pidió el envío de la Fuerza Nacional para reforzar la seguridad del estado y “combatir los actos de vandalismo registrados en las últimas horas”. “Todo el efectivo de nuestras fuerzas de seguridad está en las calles. La orden es actuar con rigor”, apuntó.

Además de Manaos, al menos en otras tres ciudades –Parintins, Manacapuru y Careiro Castanho–del interior de Amazonas hubo ataques. Hasta el momento, 16 personas han sido detenidas.