Protestas en Paraguay por el manejo de la pandemia fuerzan cambios en el Gobierno

El presidente Mario Abdo Benítez pidió a todos los miembros del Gabinete que pusieran sus cargos a disposición. El anuncio de modificaciones llegó tras la presión social de miles de paraguayos que salieron a protestar en contra de la falta de suministros clínicos y de vacunas para hacerle frente a la pandemia del Covid-19. La tensión ya provocó la renuncia del ministro de Salud Pública. 

ASUNCIÓN, PARAGUAY, 6 MAR 2021 – El presidente Mario Abdo Benítez pidió a todos los miembros del Gabinete que pusieran sus cargos a disposición. El anuncio de modificaciones llegó tras la presión social de miles de paraguayos que salieron a protestar en contra de la falta de suministros clínicos y de vacunas para hacerle frente a la pandemia del Covid-19. La tensión ya provocó la renuncia del ministro de Salud Pública. 

“El mensaje concreto es ese: el presidente escuchó a la ciudadanía, convocó a su Gabinete y pidió que pongan su cargo a disposición”, explicó este sábado el ministro de Tecnologías de la Información y Comunicación, Juan Manuel Brunetti.

Con esto, el mandatario Mario Abdo Benítez estudiará qué cambios implementar para hacerle frente a las protestas de ayer ante la falta de insumos médicos en el país. Brunetti agregó que será el mismo jefe del Estado quien anuncie las salidas ministeriales una vez “tenga hechos concretos para comunicar a la ciudadanía”. 

Aunque el ministro sostuvo que Benítez escuchó “el mensaje” de las manifestaciones, sus acciones no son acorde con lo que pedían los paraguayos. El clamor que se escuchó en las calles de Asunción, la capital, fue que todo el Gobierno dimitiera, incluyendo al presidente Benítez y al vicepresidente, Hugo Velásquez. 

Contrario a esto, la declaración de Brunetti demuestra que el mandatario no tiene planeado alejarse del Ejecutivo. Hasta ahora, las movidas del Gobierno apuntan a un cambio ministerial para intentar atenuar el descontento social. “El presidente tiene la mejor predisposición en que este segundo periodo de Gobierno sea un buen periodo, podamos recuperar la confianza de la ciudadanía y podamos hacer la mejor gestión posible”, agregó el ministro.

El escalamiento de la tensión en Paraguay: desde protestas de enfermeras hasta un posible juicio político

El sistema de salud de Paraguay no tiene suministros suficientes para enfrentar la pandemia. Así lo aseguran los gremios de enfermeras que han liderado múltiples protestas en el país. Por otra parte, los docentes se manifestaron en contra del regreso a las clases presenciales en medio del aumento de contagios. 

Ambas manifestaciones evidenciaron el descontento social que se propaga en el país por el manejo que el Gobierno de Benítez le ha dado a la pandemia. Los paraguayos también critican la lenta llegada de la vacuna, pues hasta ahora solo han arribado 4.000 dosis de la rusa Sputnik V a un país donde hay casi 7 millones de habitantes. 

La tensión es tal que escaló hasta el Senado. El 4 de marzo, los legisladores aceptaron una proposición en la que le pedían al ministro de Salud Pública que dimitiera “ante la situación en que se encuentra el sistema de salud del Paraguay y la necesidad de realizar una restauración a fin de buscar nuevas estrategias y políticas para hacer frente a la crisis sanitaria por la pandemia del Covid-19”.

En efecto, el entonces ministro Julio Mazzoleni dio un paso al lado tras reunirse con el presidente y abandonó su cargo en la mañana del 5 de marzo. El ahora exministro aseguró que renunciaba para “generar esa paz que se necesita para enfrentar” la pandemia; mientras que su reemplazo, el viceministro Julio César Borda, prometió que comenzaría a rastrear medicamentos y suministros de inmediato.

Pero nada de eso fue suficiente para aliviar la presión social. Pocas horas después de la renuncia, miles de paraguayos salieron a las calles de Asunción y de las principales ciudades del país para expresar su descontento. La manifestación comenzó frente al Congreso. Y luego, en diferentes lugares, se propagó el coro que decía “fuera Marito”, como se le conoce popularmente al mandatario. 

Las protestas pacíficas se convirtieron en la noche en un enfrentamiento entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad; con piedras y bengalas de un lado, y gases lacrimógenos y balines de goma del otro. En algunos puntos, los ciudadanos superaron la cantidad de policías, lo que obligó a los uniformados a sacar pañuelos blancos para pedir una tregua. Por otro lado, por lo menos 20 ciudadanos resultaron heridos.

Estos hechos hicieron que diferentes partidos pensaran en la posibilidad de adelantar un juicio político contra Benítez. Desde el opositor Partido Liberal Radical Auténtico hasta la facción del Partido Colorado que lidera el expresidente Horacio Cartes expresaron su intención de estudiar la posibilidad de impulsar un debate en el Congreso que obligue al mandatario a dimitir. 

Es así como el anuncio de un posible cambio ministerial es una acción de Benítez para distensionar la presión en su contra, pero puede no ser suficiente si las protestas en las calles continúan y los congresistas se suman al descontento social. 

France24, con EFE y Reuters