PARÍS, FRANCIA, 30 DIC 2020 – El miércoles, el gobierno francés enfrentó críticas por el lento progreso de su campaña para vacunar a las personas contra Covid-19, un problema agravado por los altos niveles de escepticismo público sobre la campaña.
Francia se unió el domingo a varios otros países de la UE en el lanzamiento de vacunas con el jab de Pfizer-BioNTech, centrando sus esfuerzos iniciales en los ancianos residentes de hogares de ancianos.
Pero en los primeros tres días de la campaña, menos de 100 personas recibieron el golpe, en comparación con las 42,000 hasta ahora en Alemania, lo que generó dudas sobre el enfoque cauteloso del gobierno para vacunar a una población en gran parte escéptica.
La estrategia de Francia “no se adapta a una situación que es tan peligrosa”, dijo a la radio Europe 1 Axel Kahn, un destacado genetista que lidera la Liga Nacional contra el Cáncer.
Kahn dijo que el gobierno debería tratar de persuadir a las personas que dudan en vacunarse con “transparencia y entusiasmo”.
“Necesitamos proteger al pueblo francés y a aquellos que son vulnerables”.
También pidió que los trabajadores de la salud se trasladen al principio de la cola para el jab, por encima de los ancianos.
Gran Bretaña, que comenzó las vacunaciones con la vacuna Pfizer-BioNTech tres semanas antes que la UE, ya ha vacunado a cientos de miles de personas, mientras que más de un millón han recibido una inyección en Estados Unidos.
Philippe Juvin, jefe de servicios de emergencia del hospital Georges Pompidou en París, dijo que no parecía haber una “estrategia de vacuna” nacional en Francia.
“Como individuo, me gustaría vacunarme, dar ejemplo y mostrarle a la gente que no morimos por la vacuna, morimos por Covid. Y cuando no morimos, contraemos formas graves que son muy incapacitante “, dijo al canal de televisión CNews.
– ‘Requiere tiempo’ –
Una encuesta sobre el consentimiento de la vacuna realizada por Ipsos Global Advisor en asociación con el Foro Económico Mundial mostró los obstáculos que enfrenta el gobierno para lograr la inmunidad masiva.
Mostró que solo el 40 por ciento de los franceses quieren recibir la vacuna.
Esto coloca a Francia muy por detrás de otras naciones desarrolladas como Gran Bretaña con el 77 por ciento y Estados Unidos con el 69 por ciento.
Hablando en la televisión France 2 el martes por la noche, el ministro de Salud, Olivier Veran, defendió el ritmo más mesurado en Francia y dijo que los funcionarios se estaban tomando tiempo para convencer a la gente de la idea de vacunarse.
“Se necesita un poco más de tiempo para ponerse en marcha”, dijo, y agregó que esperaba ponerse al día con el resto del mundo a fines de enero.
Rechazando las críticas en las redes sociales, un funcionario del Ministerio de Salud dijo: “No nos hemos propuesto una carrera de 100 metros, sino una maratón”.
En los tuits del domingo dando la bienvenida al lanzamiento de la vacuna, el presidente Emmanuel Macron había aludido al escepticismo generalizado sobre las vacunas en Francia.
Dijo que “la razón y la ciencia deben guiarnos” en la tierra natal de Louis Pasteur, el científico del siglo XIX que descubrió los principios de la vacunación.
“La vacuna no es obligatoria. Tenga confianza en nuestros científicos y médicos”, dijo Macron.