La Cancillería informó que autorizaron al periodista Molares a viajar a la Argentina

La Cancillería informó que autorizaron al periodista Molares a viajar a la Argentina

CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, 27 NOV 2020 – La Cancillería argentina fue informada sobre el “cese de la prisión preventiva” del fotoperiodista argentino Facundo Molares Schoenfeld, que había sido detenido en Bolivia en noviembre de 2019, y la posibilidad de que regrese al país para recibir atención médica.

En un comunicado difundido este jueves a la noche, el ministerio de Relaciones Exteriores que conduce Felipe Solá explicó que “el Tribunal Número 1 Penal de Sentencia de la ciudad de Montero autorizó que la prisión preventiva pueda ser sustituida por otras instancias”.

“Al mismo tiempo -se expresa- resolvió el Tribunal que, en vista de los argumentos del abogado de Molares y del Consulado argentino en Santa Cruz de la Sierra, Molares reciba atención médica en la República Argentina”.

“La decisión fue tomada teniendo en cuenta el compromiso del gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia de preservar la vida del ciudadano”, precisa el comunicado oficial.

En ese plano, apunta que “según el Tribunal, la autorización para viajar a la Argentina, donde además de atender su salud Molares debería presentarse periódicamente ante el Consulado boliviano en Buenos Aires, responde a que por la salud delicada de Molares están dadas las condiciones para reemplazar otras instancias que el propio Tribunal consideró”.

“Una de ellas -puntualiza- fue la detención domiciliaria en Santa Cruz, con autorización de salir a trabajar de 7 a 19”.

Asimismo, la Cancillería indicó que, “a la espera de que pueda resolverse el caso de fondo, como lo planteó sistemáticamente el Gobierno nacional, la Argentina continuará con los esfuerzos para asegurar el pleno respeto de los derechos que correspondan a Molares”.

Molares había viajado, desde Colombia, para cubrir las elecciones del año pasado en Bolivia, pero fue detenido.

El periodista debió ser hospitalizado porque padece una insuficiencia renal y, días atrás, había contraído coronavirus.

Al difundirse el caso, con la asunción del presidente de Bolivia, Luis Arce, el pasado 8 de noviembre, tomó intervención el canciller Solá quien se puso en contacto con las autoridades del nuevo Gobierno constitucional.

El 1 de octubre pasado, la Cancillería argentina presentó un pedido oficial a Bolivia para que libere a Molares “de manera urgente” y denunció que el joven sufría una “situación de denegación de justicia” por parte del entonces gobierno de facto encabezado por Jeanine Áñez Chávez.

La detención

Molares fue detenido por la Policía el 11 de noviembre de 2019, en medio de protestas de Montero, en Santa Cruz. Fue apresado estando herido.

La policía boliviana “googleó” su nombre -explicó Molares padre- y, al ver que había tenido actividad política anterior (se le atribuye pertenencia a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC), ordenó su detención.

Se trata de una “detención irregular, sin existencia de imputación penal específica, lo que constituye una violación al art. 8.2.b del Pacto de San José de Costa Rica”, enfatizó Molares, que es juez de paz en Trevelin, Chubut.

Morales Schoenfeld fue imputado 16 días después de su detención. “Antes de esa fecha nadie lo había mencionado ni denunciado”, agregó, y recordó que los hechos se produjeron en medio de una atmósfera política muy tensa, producto de la crisis política poseleccionaria en el país andino.

Se trata, explica, de “una causa colectiva en la que, además de él fueron involucradas varias personas pertenecientes al gobierno del MAS” (Movimiento al Socialismo), del expresidente Evo Morales, contra quien se había perpetrado la rebelión militar que lo obligó a renunciar, en medio de denuncias de fraude en los comicios realizados pocos días antes, el 20 de octubre de 2019.