Documental sobre Greta Thunberg

La activista habló sobre “Greta”, de Nathan Grossman

VENECIA, ITALIA, 5 SEPT – La activista por el clima Greta Thunberg dialogó el viernes con la prensa a través de una videoconferencia sobre el documental “Greta”, de Nathan Grossman, que se exhibe en el marco d

La activista por el clima Greta Thunberg dialogó hoy con la prensa a través de una videoconferencia sobre el documental “Greta”, de Nathan Grossman, que se exhibe en el marco del Festival Internacional de Cine de Venecia fuera de concurso.

“No soy la niña enojada que grita ante los líderes mundiales, no soy como me representan algunos medios; soy una chica tímida, estudiosa, una ‘nerd’ que cuida el presente y el futuro del planeta y, por lo tanto, el mío”, dijo Thunberg, desde la biblioteca del gimnasio que frecuenta.

El documental incluye imágenes inéditas y recorre los pasos de la activista de 16 años desde que empezó a hacer huelgas climáticas en 2018 hasta que devino en una figura reconocida en todo el mundo y recibió dos nominaciones (2019 y 2020) para el Premio Nobel de la Paz.

No podía faltar a la escuela (lo hace solo los viernes, una acción de protesta por el clima que inspiró el movimiento Fridays For Future, ndr), pero quería hablar con la prensa del “valor fuertemente simbólico” de la proyección del documental de Grossman.

Greta intenta retomar su vida de adolescente, con sus rutinas, después del año sabático con compromisos que la llevaron a las salas del poder global, desde Estrasburgo a la Comisión Europea, desde el Eliseo francés a la ONU, en Nueva York, y también a las calles, con el movimiento -inspirado en ella- Fridays For Future.

“Debo responder rápidamente porque debo volver a la clase”, explicó un poco incómoda cuando se vio obligada a cortar la conexión.

“La crisis del Covid-19 afectó a todos, combatir el virus es una prioridad, no se pueden manejar dos crisis juntas: por ello, las cuestiones ambientales, la lucha contra el cambio climático fue puesta en pausa, pero debemos comprender que es urgente y no podemos rendirnos si queremos tener un futuro”, dijo a ANSA al ratificar su compromiso, aunque, por su voluntad, no en primera línea.

En el potente documental de Grossman, la vida de la niña con trenzas que atravesó en un barco a vela el océano para llegar desde Plymouth a Nueva York y llevar su lucha por el clima a la Asamblea General de la ONU, desafiando a su miedo al mar y sufriendo la soledad (hay imágenes excepcionales y muy privadas), es retratada como lo que realmente es: una experiencia extraordinaria.

“La que tengo es una responsabilidad enorme, es demasiado grande para mí”, dice la joven que fue capaz de decirle a los líderes del mundo: “¿Cómo se atreven? Nos robaron los sueños con aquella fábula del crecimiento eterno y ya no hay más tiempo para darnos un futuro”.

Y es tristemente consciente de que cinco años después de los acuerdos de París sobre el clima los avances son mínimos.

“Me reconozco en el film -admite-; inicialmente estaba preocupada. Nathan estaba siempre conmigo, filmaba todo en silencio. Durante más de un año. Ni siquiera me daba cuenta de que estaba ahí y en cierto punto dudé de que estuviese haciendo un trabajo profesional (solo estaba Grossman con su cámara, ndr)”.

La película logra un retrato de Thunberg completo. No solo la niña con trenzas y síndrome de Asperger amenazada de muerte, de la que se burlaron los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y Brasil, Jair Bolsonaro y que es adorada por los adolescentes de todo el mundo y que junto a ella colocaron la lucha por el cambio climático entre las prioridades mundiales.

También se ve a la Greta que abraza a su caballo y a su perro Roxy, a la que escribe sus discursos por la noche, tratando de mejorarlos con tenacidad palabra por palabra, a la niña que se saltea las comidas y que hace preocupar a sus padres.

En el documental se llega a conocerlos, especialmente al padre, que la sigue sin dejar jamás sola a esta pequeña mujer valiente.

El Festival Internacional de Cine de Venecia fuera de concurso.

“No soy la niña enojada que grita ante los líderes mundiales, no soy como me representan algunos medios; soy una chica tímida, estudiosa, una ‘nerd’ que cuida el presente y el futuro del planeta y, por lo tanto, el mío”, dijo Thunberg, desde la biblioteca del gimnasio que frecuenta.

El documental incluye imágenes inéditas y recorre los pasos de la activista de 16 años desde que empezó a hacer huelgas climáticas en 2018 hasta que devino en una figura reconocida en todo el mundo y recibió dos nominaciones (2019 y 2020) para el Premio Nobel de la Paz.

No podía faltar a la escuela (lo hace solo los viernes, una acción de protesta por el clima que inspiró el movimiento Fridays For Future, ndr), pero quería hablar con la prensa del “valor fuertemente simbólico” de la proyección del documental de Grossman. Greta intenta retomar su vida de adolescente, con sus rutinas, después del año sabático con compromisos que la llevaron a las salas del poder global, desde Estrasburgo a la Comisión Europea, desde el Eliseo francés a la ONU, en Nueva York, y también a las calles, con el movimiento -inspirado en ella- Fridays For Future.

“Debo responder rápidamente porque debo volver a la clase”, explicó un poco incómoda cuando se vio obligada a cortar la conexión.

“La crisis del Covid-19 afectó a todos, combatir el virus es una prioridad, no se pueden manejar dos crisis juntas: por ello, las cuestiones ambientales, la lucha contra el cambio climático fue puesta en pausa, pero debemos comprender que es urgente y no podemos rendirnos si queremos tener un futuro”, dijo a ANSA al ratificar su compromiso, aunque, por su voluntad, no en primera línea. En el potente documental de Grossman, la vida de la niña con trenzas que atravesó en un barco a vela el océano para llegar desde Plymouth a Nueva York y llevar su lucha por el clima a la Asamblea General de la ONU, desafiando a su miedo al mar y sufriendo la soledad (hay imágenes excepcionales y muy privadas), es retratada como lo que realmente es: una experiencia extraordinaria. “La que tengo es una responsabilidad enorme, es demasiado grande para mí”, dice la joven que fue capaz de decirle a los líderes del mundo: “¿Cómo se atreven? Nos robaron los sueños con aquella fábula del crecimiento eterno y ya no hay más tiempo para darnos un futuro”. Y es tristemente consciente de que cinco años después de los acuerdos de París sobre el clima los avances son mínimos. “Me reconozco en el film -admite-; inicialmente estaba preocupada. Nathan estaba siempre conmigo, filmaba todo en silencio. Durante más de un año. Ni siquiera me daba cuenta de que estaba ahí y en cierto punto dudé de que estuviese haciendo un trabajo profesional (solo estaba Grossman con su cámara, ndr)”. La película logra un retrato de Thunberg completo. No solo la niña con trenzas y síndrome de Asperger amenazada de muerte, de la que se burlaron los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y Brasil, Jair Bolsonaro y que es adorada por los adolescentes de todo el mundo y que junto a ella colocaron la lucha por el cambio climático entre las prioridades mundiales.

También se ve a la Greta que abraza a su caballo y a su perro Roxy, a la que escribe sus discursos por la noche, tratando de mejorarlos con tenacidad palabra por palabra, a la niña que se saltea las comidas y que hace preocupar a sus padres.

En el documental se llega a conocerlos, especialmente al padre, que la sigue sin dejar jamás sola a esta pequeña mujer valiente. (ANSA).